lunes, 20 de diciembre de 2021

TIEMPO DE REBAJAS


El tiempo de rebajas, es bonito para pasar una buena mañana o tarde, pero, yo realmente es raro que encuentre gangas. Puede que algún año haya encontrado alguna cosa barata pero tanto como ganga pues no.

Cierto es que el pasado verano ya a finales, encontré cosas para los nietos que, si estaban muy rebajadas, pero pienso que no se había vendido todo lo que esperaban y para quitárselo de encima estaba sumamente rebajado.

Hay personas que siempre encuentran gangas y gangas, después te enseñan las compras y te quedas boquiabierta, pensando que tu eres tonta o inútil y no sabes buscar. Para mi revolver en los montones o mostradores donde hay ropa de cualquier tipo sin colocar, me es muy difícil encontrar algo.

Hace ya muchos años, tenía una amiga que se vestía siempre en las rebajas y siempre iba a la última moda. Siempre era todo baratísimo lo que compraba y a mí me tenía alucinada.

En una ocasión me invitó a ir con ella de compras en las rebajas de enero, existía todavía Galerías Preciados, íbamos muy contentas y yo pensaba que al ir con ella encontraría gangas, que me enseñaría el arte de comprar barato.

Realmente si que me enseñó su arte. Un arte que a mi no me sirvió para nada y que realmente hizo que no volviese a salir con ella. Consistía en ir buscando las prendas que le gustaban, con mucho cuidado, se las probaba y después tenía mucho arte para en los mostradores y cambiar las etiquetas de prendas baratas por las que ella había escogido que eran muy caras. Eso lo hacía con ropa con calzado o con cualquier cosa.

Me pareció una cosa tan sumamente horrible y peligrosa que cuando vi lo que hacía, me separé de ella y me fui por otro lado. Cuando salimos de allí le afee lo que había hecho y que yo no volvería a salir de compras con ella. Solo pensar en la vergüenza que hubiese pasado si le llegan a pillar y me hubiesen asociado con lo que ella hacía.

Así deduje lo que había pasado con anterioridad, pues teníamos realmente una buena amistad o eso creía yo. Salíamos bastantes veces en realidad, tanto de compras como los matrimonios. Bien es verdad que cuando llegaba la hora de pagar lo consumido, siempre se hacían los remolones y como mi marido era de mano suelta, siempre le tocaba pagar.

En una ocasión la llevé conmigo al economato de banca en donde yo había comprado unos muebles y ella me pidió que la llevase. Se enamoró de un mueble para su salón, lo midió, lo pensó y subió a casa a decirme que, si no me importaba, le firmase unas letras para pagarlo pues ella al no ser de banca no lo podía hacer.

Piqué el anzuelo y la llevé, compró el mueble y yo lo iba pagando según iban llegando las letras. Yo las pagaba, pero cobrárselas no era tan sencillo, Ya no nos veíamos tan a menudo, tenía que bajar a su casa a pedirle el dinero y siempre tenía alguna disculpa para retrasar el pago. No quiero ni contar los disgustos que tuve con mi marido y las veces que me llamó tonta por haber firmado las letras. Juré no volver a hacerlo con nadie, pero ya no había remedio.

Había que ver lo que estas personas presumían, el marido era un obrero en una fábrica de hierro, pero cuando llegaba de trabajar, parecía que lo habías dejado el chofer a la puerta de la casa. Ella era la mejor vestida del barrio y su casa la mejor amueblada.

Si no llego a salir aquel día de rebajas con ella, nunca hubiese supuesto lo que hacía para mantener aquella situación tan ficticia.

Por eso si salgo a comprar algo y lo encuentro rebajado lo compro y si no está rebajado, si puedo lo adquiero y si no me aguanto sin ello.

De todas las situaciones se aprende.

 

                            PILAR MORENO 17 diciembre 2021

 

sábado, 4 de diciembre de 2021

UNA HISTORIA DE AMOR

Si pensamos que el amor es una situación de enajenación mental transitoria, en la mayoría de los casos puede aplicarse. Pero, hay otras situaciones en las que realmente no se dan estas circunstancias. Se da en parejas que viven enamoradas desde que se conocen hasta el final de sus días, pasan sus vidas unidas sin separarse nada más que lo estrictamente necesario. Y cuando llega el final la pareja que queda muere al poco tiempo de pena y de soledad.

Voy a relatar en caso de una persona que conocía al amor de su vida desde niña, habían jugado juntos y prácticamente se veían a diario ya que eran familia cercana. Cuando se encontraban, la mirada de los dos delataba el cariño que entre ellos había, se adivinaban las chispas que de aquellos ojos salían. Desde muy jóvenes salían al cine, al teatro y a cualquier evento, eran inseparables. Jamás a lo largo de tantos años, hubo ningún roce, solamente un beso como hermanos, en la cara, cada vez que se veían, al salir a pasear o al cine simplemente se cogían de la mano o en todo caso él le echaba el brazo por encima y mientras reían la apretaba contra él. Lo pasaban genial pues el carácter de los dos les hacía pasar ratos increíbles, siempre con bromas y chascarrillos, que les hacían reír sin parar.

Una noche contando ella diecinueve años y el veintitrés, salieron como de costumbre, cenaron en una cafetería y acudieron al cine. La película comenzó y él le pasó el brazo por encima del hombro, cosa que hasta ese día no había ocurrido, la comenzó a arrimar contra él y en un determinado momento la besó intensamente. Ella no se resistió para nada pues en el fondo lo deseaba con todas sus fuerzas, fue lo más maravilloso que le había pasado jamás, en ese momento llegó a tocar el cielo, no podía creer que lo que tanto tiempo llevaba esperando estuviese ocurriendo. El momento más feliz de toda su vida. A él se le veía también feliz y apasionado.

A la salida del cine cogidos de la mano él la tomo contra su pecho y le pidió perdón. “No hay nada que perdonar, lo deseaba” Yo también lo deseaba, pero esto es el final, no podemos seguir.

De suponer es que se echó a llorar sin consuelo, a decirle y preguntarle miles de veces el porqué, no lo entendía, si la quería no podían dejarlo. Solo decía que había fuerzas mayores que lo impedían, la acompañó a su casa y ahí termino todo.

Ella se sumió en una inmensa tristeza y como intuía de donde venían las fuerzas mayores, decidió poner espacio por medio y cambiar de vida.

Al cabo de un año, conoció a una persona que se enamoró perdidamente de ella, le ofreció de todo y logró que poco a poco se le fuese pasando la pena. La introdujo enseguida en casa de sus padres y cuando su madre la conoció, le dijo eres como la princesa de los ojos tristes. Se quiso casar enseguida y ella aceptó. Fijaron fecha de boda y cuando las invitaciones hubo que repartirlas, no tuvo más remedio que ir a entregársela a la familia y a él. Cuando se encontraron frente a frente le dijo aquí está la fecha de mi boda, es un buen chico, me adora y su familia también, pero, si tú dices algo, todo se anula. Solo dijo te deseo que seas muy feliz, de verdad es lo que más deseo. Ahí quedó todo.

La boda se celebró y comenzó una vida llena de avatares y aunque ella iba aprendiendo a querer a su esposo, aquel amor no se le iba de la cabeza, cada cosa que hacía la hacía pensando en si fuese él quien era el destinatario. No podía salir de su cabeza, pasaban los años y la situación era la misma. A los cinco años de haberse casado, recibió la invitación de la boda de él. No asistió a la misma como él tampoco había asistido a la suya. Ella pensó que había tardado más en olvidarla que como supusieran ella había tardado en olvidarlo, lo que nadie sabía es que ella nunca lo olvidó.

Un día le avisaron por teléfono de que había tenido un accidente y había fallecido. Sintió un dolor inmenso y le lloró como nunca lloró a nadie.

Le consta que él no fue feliz en su matrimonio y ella en el suyo hubo de todo, pero después de cincuenta y tres años de aquellos hechos, sigue pensando en él, fue su primer y único amor.

 

PILAR MORENO 3 diciembre 2021

 

SINOPSIS DE “NUNCA MÁS JOVEN QUE HOY”

Es un libro corto de fácil lectura y argumento dramático.

La autora se desnuda en él mismo contando sus vicisitudes ante la vida, a las que un canalla de hombre la ha sometido.

Dura vida, sin lugar a dudas, ante la que cualquier mujer hubiese renunciado ante ese loco amor, del que nunca supo deshacerse.

Un amor muy fiel y perjudicial, del que obtuvo tres hijos muy deseados por ella, pero que pongo en dudas sin por parte de él también.

 

Me gustaría saber, si la depresión que tuvo cuando lo conoció fue provocada por el abandono de su esposa, quizás y a tenor de lo que Mercedes cuenta, fuese un abandono provocado por las infidelidades que él cometiese en lo que estuvo junto a ella.

No narra lo que fue de esa mujer y del hijo que con ella tuvo. Posiblemente salió tan harta de él que nunca más quisiera saber de su existencia y al tiempo alejar a ese hijo, que podría pensar que ese padre no lo daría buen ejemplo.

Por otro lado, siendo Mercedes una mujer valiente para aguantarlo, como no fue capaz de abandonarlo y criar ella sola a sus dos hijos mayores, ya que tenía el apoyo de sus padres y a su vez ella era una persona muy válida y capaz de trabajar en cualquier cosa y no se hubiese muerto de hambre.

Dicen que el amor es ciego, pero, yo creo que en determinados casos además es tonto. Pienso que en su lugar por muy enamorada que estuviese, nunca hubiese aguantado tantas humillaciones, tantas pullas en forma de canciones y en la cama aguantar que nombre a la querida mientras yace con ella.

Cada persona es un mundo y es respetable lo que cada uno hace con su vida. En la actualidad Mercedes está casada legalmente con ese monstruo y pienso que cuando la cabra tira al monte, es difícil de bajarla. Seguirá la trayectoria de picaflor que ha mantenido toda su vida.

                     PILAR MORENO 28 noviembre 2021