jueves, 26 de marzo de 2015

TRAGEDIA

TRAGEDIA En el Prat alzó su vuelo, Dússeldorf lo esperaba, a mitad del camino en los Alpes Franceses el viaje terminaba, no había cumplido su trayecto nadie sabía lo que pasaba, descendía a toda prisa contra las rocas explotaba, en la torre de Marsella saltan todas las alarmas nada se sabe de ese vuelo eso es cosa muy rara, ciento cincuenta pasajeros muchas vidas truncadas, ejecutivos, estudiantes, bebés, padres de familia, tripulantes y azafatas vidas con ilusiones de raíz ya arrancadas, todos llegamos al mundo con una fecha en la frente marcada invisible al exterior pero que de ella no te escapas, qué fue lo que sucedió un orate que a los mandos se hallaba puso rumbo hacia las rocas donde el avión se estrellara, el enloquecido copiloto que la nave manejaba sería consciente de las vidas que segaba, sollozos, rezos de familias destrozadas toda Europa enlutada, cincuenta y uno de nuestros compatriotas dejaron sus vidas en aquella hondonada sus cuerpos esparcidos por esas preciosas montañas, DESCANSEN EN PAZ PILAR MORENO 27- Marzo 2015

miércoles, 18 de marzo de 2015

NOTRE DAMME

Bajo las gárgolas de la preciosa catedral, se encontraba Janet esperando a su amiga Cintia. Habían quedado para dar un paseo y después hacer una de las cosas que más les gustaban a las dos, subir hasta lo alto de la Torre Eiffel. Eran un montón de escaleras, pero a ellas no les importaba pues su juventud podía con todo o con casi todo como ellas mismas decían. Era extraña la tardanza de Cintia y Janet comenzó a ponerse nerviosa pues su amiga era bastante puntual por lo que comenzó a llamarla por teléfono sin obtener respuesta. A la semana siguiente, bajo una incesante lluvia, Janet volvió otra vez a la puerta de la Catedral, esta vez cobijada por un paraguas, enlutada toda ella y con un gran ramo de violetas en su mano. Se celebraban las exequias por Cintia. Llevaba esas flores ya que eran las favoritas de su amiga y con ellas quería decirle todo lo que para ella había significado, eran unas grandes amigas, casi como hermanas, desde su más tierna infancia. La tarde en que Janet la estaba esperando en aquel lugar, mientras estaba nerviosa por su tardanza, Cintia había sido secuestrada por unos Yijadistas en un comercio, junto con otras personas y simplemente por no pertenecer a su religión y negarse a gritar “ALA ES GRANDE”, los dispararon sin piedad, dando muerte a todos los que en aquel momento se encontraban allí. Para Janet supuso una terrible pérdida, pasaban los días y no lograba hacerse a la idea de lo que le había ocurrido a su amiga, le habían arrancado un trozo de sí misma. Tenía tremendos sueños, no podía dormir, su vida se había convertido en un constante temor y a la vez una furia brutal. Una mañana se levantó con una clara idea en su mente y se juró a si misma dar con los asesinos de Cintia y con sus propias manos acabar con ellos. PILAR MORENO 14 Marzo 2015

domingo, 15 de marzo de 2015

En el silencio de la cómplice alcoba siento tibios húmedos besos deslizarse por mi cuerpo placer exquisito, incomparable, al tiempo que mis dedos se deslizan examinando tu suave piel descubriendo las oquedades existentes en cada palmo de ella, sublime momento alumbrado por la luna sabiendo que siendo dos, formamos solamente uno en la conjunción de un amor apasionado y calmo a la vez, sentir los fluidos derramados por nuestros cuerpos son el culmen de nuestras vida, nada hay más hermoso supremacía de mortales abarcando con nuestros corazones en el más infinito de los lugares. PILAR MORENO 15 Marzo 2015

sábado, 14 de marzo de 2015

SI YO FUERA BLANCA

Aquella mujer, entró en el paritorio dilatada por completo, pero la criatura no conseguía salir al mundo por más esfuerzos que ella hiciese. Se presentó sin esperarlo, un parto muy difícil, y hubo que terminar por practicarle la cesárea. Después de logar sacarle la criatura de vientre, una niña, negra como un carbón y de escaso peso, la mujer tuvo una hemorragia, que por poco no lo cuenta. Estuvo ingresada varios días, hasta verse repuesta del todo pues tantas dificultades a la hora de parir, se debían a la desnutrición que la madre arrastraba desde hacía tiempo. La bebé, era fruto de una relación que la mujer había tenido con un terrateniente de Guinea Ecuatorial, cuando el patrono, después de haber disfrutado de ella todo lo que había querido, se enteró de que la había dejado embarazada, ya no le interesaba que siguiese a su servicio y la echó de sus tierras, al tiempo que la molía a palos. Era un caso muy normal entre los sirvientes y los patronos en aquellas tierras, se encaprichaban de quien más les gustaba y no podían negarse a que el amo disfrutase de sus cuerpos, seguían siendo como esclavos, pero no estaría bien visto que un patrono tuviese un hijo con una criada. Al salir de aquel terreno, por más que pidió auxilio en las plantaciones vecinas, ya era una mujer marcada y por supuesto que nadie le daría trabajo, nadie se expondría a contradecir las ordenes de un buen patrono. Debía buscarse la vida como pudiese para poder sobrevivir y sacar adelante al hijo que llevaba en sus entrañas. Anduvo errante hasta llegar a Mauritania, país totalmente desconocido para ella, pero en el cual encontró unas personas que al igual que ella buscaban una solución para sobrevivir. Tampoco allí ellas tenían ninguna posibilidad, por lo que habían decidido pagar a unos mafiosos una suma de dinero para que les diesen una patera y tomar rumbo a España. No era la idea que mejor le pareciese pero viéndose tan desprotegida y desamparada, tomó la decisión de incorporarse al grupo que iba a embarcar en aquella cáscara de nuez, dispuestos a cruzar el océano. Esperaron que llegase la noche para que nadie pudiese abortar aquel embarque y salieron de la playa rumbo a un incierto destino. No llevaban por equipaje nada más que lo puesto, la embarcación era muy pequeña y más de cincuenta ocupantes, pesaban demasiado como para llevar nada más que lo estrictamente necesario. Alguna manta que por supuesto debían de compartir al menos entre tres y unas pocas viandas era todo lo que habían subido a bordo a parte de sus cuerpos. El frío de la noche era tremendo, se filtraba hasta los mismos huesos y los días eran demasiado largos, sed, hambre cansancio, siempre en la misma postura, era imposible moverse, estaban hacinados entre aquellas cuatro tablas que parecía que el mar en cualquier momento se les iba a tragar. El tiempo pasaba muy despacio, los pocos víveres que habían embarcado se iban terminando, la sed hacía que sus cuerpos se debilitasen cada día un poco más. Las llagas en la cara y en la boca debido al salitre del mar y al sol, les estaba cubriendo, muchos fueron muriendo poco a poco, sin poder hacer nada por ellos, simplemente echarlos al mar para al menos no contagiarse de alguna enfermedad y de paso hacer sitio para ir un poco más cómodos. Tampoco sabían cuanto tiempo tardarían en ver tierra firme y si lo conseguirían. Pasó mucho tiempo o al menos a ella se lo pareció, fue una eternidad lo que tardaron en llagar a España. Después de tantas calamidades, cuando tocaron la playa y lograron desembarcar, la mayoría no sabían ni andar, habían sido demasiados días en la misma postura, que las piernas no les respondían, además de la inmensa sed y desnutrición que traían. Les salió al encuentro La Guardia Civil y efectivos de la Cruz Roja, los cuales los arroparon y dirigieron a unos alojamientos en los que después de hacerles un reconocimiento médico, podrían descansar hasta ver lo que las autoridades debían hacer con ellos o que destino darles. Según les dijeron, aquello era Cádiz una preciosa ciudad del sur de España. Después de la primera noche, aquella mujer, se llamaba Wanda, se puso de parto, ella había perdido hasta la noción de tiempo que llevaba embarazada, pero a ella le parecía que todavía no debía tener a su bebé. Fue llevada al hospital y tuvo a su niña, mientras la atendían ella solo sabía decir “SI YO FUERA BLANCA” “SI YO FUERA BLANCA”, no tendría que haber pasado todos estos sufrimientos. PILAR MORENO 28 febrero 2015