lunes, 25 de mayo de 2020

UN CAMBIO RADICAL




     De un día para otro se presenta una pandemia infecciosa, muy contagiosa y peligrosa que comienza a llevarse por delante a miles de personas, sobre todo de mayores. El gobierno toma la decisión de dejarnos confinados en casa para evitar contagios y que podamos salvarnos la mayor parte de los habitantes de las ciudades.
       Cuando esto ocurre, es pleno invierno, nos conformamos con quedarnos en casa calentitos al amor de nuestras calefacciones y cada uno dentro de sus hogares con lo que más confortables se encuentran. Estar cómodos es lo más importante, hay quien decide estar en pijama, otros en chándal y otros como yo que no soy capaz de usar ninguna de esas dos prendas. Me gusta estar arreglada pero informal; para estar en casa simplemente utilizar ropa cómoda que ya no uso para salir a la calle. 
       Tengo que alegar que los pies son la parte de mi cuerpo que más sufre el frío por lo que siempre tengo que gastar unas buenas zapatillas abrigadas. Siempre al comenzar la temporada compro unas nuevas, pero sin tirar las de la temporada pasada por si hay un accidente, en un momento determinado tener de donde tirar hasta poder adquirir otras. Pues en esta ocasión y dado el largo tiempo de estar en casa sin otro tipo de calzado, he destrozado las de esta temporada como también las que tenía guardadas de la pasada.
       Ahora de buenas a primeras, hemos pasado a un calor de pleno verano, pues bien ha habido que sacar las chanclas de verano y si bien digo las chanclas pues, los tacones es prácticamente imposible ponerlos pues yo soy la primera que en estos momentos y después de tanto tiempo sin calzarme, creo que no podría caminar con ellos y eso que ya no los utilizo de la altura a que siempre acostumbré.
       Aún con muchas limitaciones todavía, ya podemos salir a la calle y comenzar a lucir las prendas tan monas que hemos adquirido para comenzar la temporada de verano y la que no podemos guardar para el tiempo de vacaciones ya que creo que este año las vacaciones la mayoría ya las hemos tenido confinados en nuestros hogares. Después de la situación que estamos viviendo, cuando muchísimas personas se han quedado sin trabajar, otras con unos ERTES que muchos no han cobrado a día de hoy y las colas de personas que hay solicitando bolsas de comidan de las asociaciones vecinales y de las campañas aportadas por Caritas y Cruz Roja. ¿Quién va a poder ir de vacaciones?
       Los que puedan hacer esas vacaciones, serán las personas de un nivel que no le afecte esta situación y que llevan muchos años sin que les afecte y seguirán sin afectarles pues para ellos no hay mala situación.
       Esperemos que para años venideros la situación económica del país haya cambiado de una manera tan favorable que pueda salir de vacaciones hasta el más pobre de los que hasta ahora existían en el país.

                     PILAR MORENO 25 mayo 2020

LA CIUDAD SE DETIENE




Despierto, nada escucho
no hay niños ni coches,
no hay bocinas
que está pasando.
la ciudad parece un espectro
nadie en las calles
todo es silencio
un silencio ensordecedor
más contentos los pájaros
trinan con insólita alegría
se sienten más los mirlos y los jilgueros
las urracas también fuerzan sus gorjeos
el silencio va penetrando en mi vida
cualquier ruido ahora es extraño
siento llegar al vecino
lo delatan sus rápidas pisadas
se siente su micción y el agua de la cisterna
me congratula saber que hay alguien
vivo también en la casa
no están todos muertos
ya no estoy tan sola
algo muy grave ha debido ocurrir
quizás mañana pueda enterarme
sintonizo el dial de la radio
una maldita pandemia
instalada entre nosotros
ha hecho que nos confinen
dentro de nuestros hogares
quien sabrá por cuanto tiempo.

PILAR MORENO 14 mayo 2020

martes, 19 de mayo de 2020

UN CONFINAMIENTO ANTIGUO




      Allá por el año 1936 en sus principios, todo estaba muy revuelto, había muchos comentarios de que, si podía estallar una guerra civil, pero muchos pensaban que era un bulo, que aquello no podría llegar, llevaban ya unos cuantos años que las cosas no marchaban bien, pero, no sería para tanto. Bien pues eso mismo me está recordando a los tiempos que estamos viviendo, desde que estamos confinados, ahora que tenemos a nuestro alcance, a través de las redes sociales, mucha información, hay personas que a todo te dicen, eso es un bulo. Pues entonces no lo fue.
       Mi relato es sobre una familia que tenían como negocio, una tienda de ultramarinos, situada en un céntrico barrio de Madrid, entre la plaza de Santo Domingo y la plaza del Senado o de Isabel la Católica, creo que ese era el nombre.
       Como se había pronosticado, el 18 de julio, estalla la guerra civil. Tenía esta familia su vivienda en la calle de Fomento y justo debajo de su casa instalan una Checa, a la cual llevaban a todas las personas que detenían, unas con razón y otras sin ella, pero en la cual, se torturaba y maltrataba a la gente hasta que los llevaban a fusilar si es que antes no los habían matado de alguna paliza.
       Aquella familia, no pudo resistir tal situación, además del miedo que suponía estar justo encima de aquel terrorífico sitio. También de los bombardeos que había por aquel entonces. Decidieron evacuarse de aquel piso y se cobijaron en la tienda de ultramarinos. En la parte superior de la misma, había un cuarto alargado que servía de almacén y allí colocaron sus enseres y colchones en donde dormía el matrimonio con sus seis hijos. En la trastienda, había una taza de water con su puerta y un poco mas lejos una pila grande en donde se podían asear y a su vez servía para el servicio de cocina que allí mismo habían montado.
       Cuando sonaban las sirenas anunciando los bombardeos, corrían hacia la cueva a resguardarse y alojaban también a los vecinos que lo deseaban y que vivían en aquel mismo edificio. La cueva era toda de piedra y eso les daba una seguridad de salir ilesos.
       Así se mantuvieron hasta que en 1939 llegó el fin de la contienda.
       Después no volvieron a lo que había sido su hogar, se mudaron a la calle de Leganitos, también en el mismo barrio, justo a la espalda de Torija que es donde estaba la tienda de ultramarinos.
       Es un hecho real como la vida misma, es la historia de mis abuelos paternos.

                            PILAR MORENO  19 mayo 2020


martes, 12 de mayo de 2020

USURPACIÓN




          Estoy convencida de que este confinamiento ha sido necesario para frenar la pandemia pues no ha sido solo nuestro país el que lo ha sufrido, también el resto del mundo se encuentra en la misma situación. Por el contrario he escuchado y sabido de buenas fuentes informativas que en otros países no han sido tan estrictos como en el nuestro y sin embargo no ha habido tantos fallecimientos ni tantos contagios como aquí, por ejemplo todo el norte de Europa, Austria, etc.. (Amigos y familiares que viven en estos otros países)
          Tengo una edad no excesivamente avanzada, pero, si lo suficiente para que en estos dos meses de confinamiento haya sido usurpada una parte importante de mi vida. Mis hijos, que viven en el extranjero no hayan podido venir a pasar la Semana Santa en su país y con su familia como sucede todos los años. Que uno de mis nietos cumplía años y tenía gran ilusión por celebrarlo conmigo ya que soy la única abuela que les queda. La gente joven no da el valor que esto tiene, ellos recuperarán el tiempo perdido y sus ansias de salir solo son para juntarse con los amigos y tener juergas. Nosotros los mayores lo vemos de otra forma. Somos mucho más precavidos, no dejamos las mascarillas ni los guantes pues sabemos que puede ser nuestra salvación y procuramos salir lo menos posible a la calle, solamente a las cosas imprescindibles.
          Siento gran pena por todo lo que está sucediendo, por todas esas personas que se han quedado por el camino, que fueron al hospital porque no se encontraban bien y ya no volvieron a ver a sus familiares y sin que estos los hayan podido despedir como se merecían. Que se está marchando la generación que más ha luchado en este país y que aún ahora sigue en muchos casos luchando para sacar adelante a sus familias.
          Creo que la vida es injusta o que se está portando injustamente con ciertas personas o familias que sin haber tenido grandes cosas y conformándose con lo que había, ahora de golpe se lo arrebata todo y sobre todo lo que más vale su vida y las de sus familias. En muchos casos ha habido más de un difunto y eso es muy difícil de superar.

                              PILAR MORENO  12 mayo 2020

domingo, 10 de mayo de 2020

EL ROBO



Siento que me han robado dos meses de mi vida, a mi edad es mucho tiempo el perdido. ¿Los jóvenes pueden recuperar, pero y nosotros? tendremos suficiente tiempo? es una incógnita y grande y cuando nos dejen por fin salir como nos adaptaremos a las nuevas normas ¿seremos capaces de vivir de forma distinta a como lo veníamos haciendo?
Ahora los pocos ratos que salgo a la calle, bien para ir al médico o a comprar, me siento agobiada, voy corriendo parece que estoy cometiendo una falta grave. Incluso cuando salgo a tirar la basura a los contenedores que están justo de frente a mi portal, lo hago muy deprisa, tengo la sensación de que alguien me vigila y me persigue.
Estoy convencida de que este confinamiento ha sido necesario para frenar la pandemia pues no ha sido solo nuestro país el que lo ha sufrido, también el resto del mundo se encuentra en la misma situación. Por el contrario he escuchado y sabido de buenas fuentes informativas que en otros países no han sido tan estrictos como en el nuestro y sin embargo no ha habido tantos fallecimientos ni tantos contagios como aquí, por ejemplo todo el norte de Europa, Austria, etc..
En mi pensamiento está y claro es un pensamiento mío, que si detrás del confinamiento necesario, no habrá otras razones por las que nuestro gobierno nos tenga encerraditos en casa y así mientras ellos poder hacer y deshacer a su antojo. Hay cosas que no me cuadran nada y no veo naturales, como las leyes o artículos sacados en el BOE los sábados por la tarde.
Espero estar equivocada y que con nuestro sacrificio esta situación caótica se solvente lo antes posible.
                  PILAR MORENO 10 mayo 2020


jueves, 7 de mayo de 2020

¿LOCA?



En la noche silente
abrazo el sueño reparador
de pronto siento tus pasos,
pasos fatigados casi arrastrados
iras al servicio pienso?
Vuelvo a escucharlos
regresas a la cama
el ruido del oxígeno al respirar
el sueño me envuelve de nuevo
continuamente siento tu presencia
sé que ya no estás, pero,
no me siento sola
tu espíritu me acompaña
día y noche, si a todas horas
otra vez la noche llega
me acuesto, rezo y duermo
más de pronto escucho como me llamas
como tú lo hacías siempre
es tu voz inconfundible
ese tono cariñoso
me siento en la cama
te pregunto, me necesitas?
está claro no obtengo respuesta
me pregunto
ME ESTARÉ VOLVIENDO LOCA

       PILAR MORENO  7 mayo 2020





miércoles, 6 de mayo de 2020

LAS PRISAS NO SON BUENAS




       Estamos pasando uno tiempos, difíciles. Esta pandemia que nos ha sorprendido nos ha enseñado que todo se puede detener y que todo puede esperar, que por muchas cosas que tuviésemos programadas para hacer, debían esperar hasta mejor ocasión. Lo único que corría prisa era, ir al hospital si te encontrabas con síntomas y aún así ha habido muchos casos que no han llegado a tiempo y su vida quedó truncada por el camino, que todos sus sueños quedaron interrumpidos para siempre. Ya no había vuelta atrás.
       La vida me enseñó hace muchos años que las prisas no son buenas para nada. Yo siempre iba con prisas para llegar a todo, sobre todo después de haber estado en casa de mi madre. Ella siempre esperaba a la hora en que me tenía que ir para bien contarme alguna cosa o que le hiciese algo que se le había olvidado y así me retenía un rato más con ella.
       Aquel día salí ya corriendo desde su casa pues se había hecho demasiado tarde para llegar a mi casa y preparar la cena para mi familia. Tomé el metro sin parar de correr e iba pensando en que todavía tenía que hacer trasbordo y estaba sumamente nerviosa.
       Cuando hice el cambio de estación, estaba en el andén el convoy que debía coger, como loca me tiré hacia el último vagón con tan mala suerte que en ese momento cerró las puertas. Me quedó el bolso dentro del vagón y yo fuera, al arrancar comencé a correr detrás de él pues el bolso estaba dentro. Un buen hombre que lo vio desde dentro tiró del bolso y me hizo señas de que me esperaba en la próxima estación. Si no llega a ser por él, el tren me hubiese estampado contra el túnel.
       El pobre hombre se asustó tanto como yo y sin saber quien era me salvó la vida. En efecto en la siguiente estación me estaba esperando y me comentó que había sido una imprudente y me podía haber costado caro. Con mucha congoja le conté lo que me pasaba y me dijo que valía más mi vida que unos minutos de retraso.
       Cuando llegué a mi casa no conté nada de lo sucedido pues no quería más problemas. Creo que mi marido nunca lo supo.
       Ese día aprendí una buena lección y a partir de entonces me dije a mi misma que pondría todos los medios para no entretenerme tanto y sobre todo evitar una situación como aquella en la que podía haber perdido la vida y todos habrían salido perdiendo pues ya no podría nadie disponer de mi tiempo, pero sobre todo yo que hubiese abandonado este mundo para siempre.

                     PILAR MORENO 6 mayo 2020

sábado, 2 de mayo de 2020

HISTORIAS DESDE MI CASA "EL BICHO"


HISTORIAS DESDE MI CASA

EL BICHO

Bicho desconocido, asesino, infame, infecto.
¿De dónde has salido? ¿Quién te ha soltado al mundo para destruirlo?
 En poco tiempo cuánto daño has hecho ¿Cuántas personas te has llevado de este mundo? No hay derecho, sobre todo te has llevado a nuestros mayores, las personas más vulnerables y las que habiendo pasado una cruenta guerra civil, a su término, con hambre, sudor y mucho esfuerzo, fueron capaces de levantarlo, haciendo de él un próspero país, uno de los más bellos del mundo, adaptándolo a la modernización, dotándolo de las mejores y mayores comodidades conocidas en esa época.
Se sacrificaron por los hijos, dándoles carreras universitarias, para que en el futuro fuesen mejores que ellos, ya que algunos apenas sabían leer y escribir, y no tuviesen que luchar tanto como ellos lo habían tenido que hacer para sobrevivir y sacar adelante a sus familias. Otros crearon negocios con los oficios que sabían, que fueron prósperos y dejándolos y en algunos casos llegando a terceras o cuartas generaciones en manos de los hijos en el futuro.
A esos que tantos desvelos y angustias habían pasado, ahora vas y te los llevas. Ahora que muchos de ellos seguían sacando adelante a sus familias con sus miseras pensiones ya que la falta de trabajo en el país hacía imprescindible que esos abuelos recogiesen en su casa a hijos y nietos, para ahorrarles el alquiler, la luz, el agua, etc. etc. Teniendo que hacer juegos malabares con sus paguitas para poder darlos de comer a todos.
Si te los has llevado a esos, contagiándoles con tus malas artes, haciendo de sus pulmones y demás órganos vitales puras piltrafas, sin solución alguna de recuperación y han sido tantos los que se han juntado en los hospitales que, por falta de medios, los sanitarios han tenido que decidir quien vivía y quien moría, a todos era imposible aplicarles los respiradores o los tratamientos más adecuados para su curación.
Yo tengo una teoría y es que te dieron suelta en China, si en China. Te fabricaron en unos laboratorios sabiendo lo malo que eras y te soltaron al mundo, con la única intención de hacerse con los mandos del planeta. Tus inventores no podían soportar que hubiese un país más rico que ellos y encima se lo hiciese saber. Es mucha casualidad, que en ese inmenso país haya habido tan pocos casos, comparándolos con el resto del mundo y que se hayan curado tan pronto, cuando en occidente todavía emergen cantidad de contagios y de fallecidos. A mi modo de ver, a la que te inventaron, también inventaron el antídoto y ese es el resultado.
Para más conclusiones que yo saco es que en las principales ciudades de ese país como son Pekin y Beigin las dos capitales más importantes no haya habido un solo caso, son las ciudades en las que viven todos los mandatarios, así como donde se organizan todas las finanzas. Es demasiada casualidad. Y para colmo ahora se están poniendo las botas vendiendo a los demás países sus mascarillas y toda clase de equipos de protección, lo que una vez más me hace pensar que estamos en sus manos.
Creo que estamos viviendo la tercera guerra mundial, pero sin disparar un solo tiro, nos han metido en una guerra biológica en la que ni vemos ni sabemos por donde ataca el enemigo, pero que es un enemigo cruel y sin piedad que en silencio está haciendo un terrible daño en la sociedad, así como en la economía mundial, claro que a unos países nos afecta más que a otros, pero que en general nos va hacer endeudarnos por muchos años para poder reflotar nuestro país.

                                            PILAR MORENO 2 abril 2020
HISTORIAS DESDE MI CASA
María del Pilar Moreno Díaz
Fecha nacimiento 26 enero 1950