sábado, 18 de abril de 2020

MI CONFINAMIENTO




Desde el día 12 de marzo estoy confinada en mi casa, vivo sola ya que soy viuda desde hace dieciocho meses. Me había acostumbrado, si es que alguien es capaz de acostumbrarse a esta situación, pero ahora es cuando realmente me estoy dando cuenta de lo que es la soledad impuesta. Desde que mi esposo se marchó, si que me sentía sola, pero de diferente forma. Dada mi forma de ser, no dejé, desde el primer día, mis actividades diarias, de salir a tomar un aperitivo con mis compañeras, a hacer mis compras diarias, al cine a pasear y desgraciadamente también a varios médicos por cuestiones de salud. Todo llevándolo con la mayor dignidad posible.
Ahora ha llegado esta maldita pandemia y de la noche a la mañana ya no hemos podido volver a salir a la calle. Yo al menos no lo he hecho pues soy persona mayor y de alto riesgo por mis dolencias.
Diariamente se ha impuesto el salir a los balcones para aplaudir a los sanitarios, policías y demás personal de servicios que gracias a ellos los que estamos confinados podemos subsistir. Yo no aplaudo pues mi casa, aunque tiene una tremenda terraza, también tiene un muro que la rodea y no veo a nadie. Escucho las bocinas de los coches y las sirenas a lo lejos y los únicos balcones que veo no sale nadie. O salen por otro lado. Entonces rezo un Padre Nuestro y un Ave María, creo que les puede llegar y Dios Nuestro Señor les ayudará y les protegerá pues en manos de él estamos.
Por otro lado, no puedo hacer ejercicio, mis convicciones me lo impiden y doy paseos a la terraza cuando la lluvia me lo permite, que llevamos unos días que no para de caer agua como si no hubiese llovido nunca. Me deleito con las plantas que tengo, que son muchas y están preciosas, cuando salga un poco el sol esto va a ser un vergel.
Espero que este confinamiento termine lo antes posible y podamos volver a ser los de antes, asumiendo la situación económica que nos espera y que los que se queden o han quedado ya sin trabajo, lo puedan recuperar lo antes posible.

                    PILAR MORENO 17 abril 2020

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